Hola a todos,

Somos los padres de Marina Sánchez, que ha tenido la gran suerte de poder estudiar en el colegio UWC Adriatic, en Italia durante los años 2016-18.

Cuando Marina fue seleccionada para participar en el programa, sabíamos que iba a ser una gran oportunidad para ella, vivir en un entorno internacional, compartiendo experiencias con alumnos de todo el mundo, siguiendo un programa de estudios que enfatizaba el aprendizaje desde todos los aspectos, y no sólo el académico. Sí, estábamos muy contentos. Pero después llegó el momento de hacer las maletas y despedirnos de ella, y he de reconocer que nos costó y a día de hoy, nos cuesta no tenerla con nosotros. Ya sé que está cerca, que existen las tarifas planas, pero la verdad es que no se habla todo lo que yo quisiera y si dijera que es fácil separarse de una hija con 16 años mentiría.

PERO, y esto es muy importante ni en un solo momento hemos lamentado que esté estudiando en este fabuloso colegio.  Los planes de estudio y la organización de las clases es un 10, nos encanta que se les dé una formación mixta de ciencias, sociales y artes, que se les motive para que busquen información y creen sus ensayos sobre la materia. Los profesores y el sistema educativo es impecable, el nivel de exigencia es alto pero yo creo que la motivación también.

Por otro lado, este colegio va más allá de lo académico, y esto para mí es fundamental, fomentan la implicación de los alumnos con los temas sociales, hacen de la interacción con otras culturas y pensamientos una formación única, se les anima a que participen y creen una sociedad más implicada en temas de injusticia, igualdad, y servicio a los demás.

Para finalizar, sólo diría que ojalá hubiera más colegios como este. Aunque haya sido duro separarnos de nuestra hija nunca hemos dudado de que haber sido seleccionada para estudiar en este colegio es lo mejor que le podía haber pasado.